
 Llegaban a esta 
GP empatados a dos victorias 
Hamilton, Alonso, Masa y 
Raikkonen, y con todo preparado para celebrar la victoria del inglés en casa. Sin embargo 
Kimi y Fernando aguaron la fiesta a 
Lewis.
Hamilton salió desde la 
pole poco cargado, y lógicamente perdió dos posiciones en el primer 
repostaje. Curiosamente volvió a hacer podio (3º y noveno consecutivo) pero a más de medio minuto de la cabeza otra vez, en otra 
mediocre carrera. Lo bueno del caso es que no le quedó más remedio que reconocer que esta vez no copió los reglajes de Alonso y se equivocó. Con lo cual se confirma la polémica que ha habido últimamente de si son Fernando y Pedro los que ponen el coche a punto, y es el inglés, con ayuda de su pilotaje y -sobre todo- de su equipo, los causantes de tan brillante 
debut en la F1 aprovechandose del trabajo de los demás. 
Alonso por su parte, sacrificó la 
pole por la carrera, y a punto estuvo de 
salirle bien. Salió tercero, lideró la carrera después de la primera parada, pero un par de segundos le faltaron para que 
Kimi no le arrebatara la victoria en la segunda. Pero lo que mejor hizo fue ocultarle los reglajes a su "compañero" hasta casi el inicio de la carrera, dejándole en evidencia en su propia casa, y de paso, 
reivindicándose como el campeón que es. Todo un aviso a 
McLaren.  
 
Y ha vuelto el 
Kimi ganador: segunda victoria consecutiva. Y otro que ha demostrado madurez. Mimó la mecánica hasta el final asegurando la victoria, y no se dedicó marcar vuelta rápida tras vuelta rápida en los últimos giros como solía hacer inconscientemente en 
McLaren. 
Y también 
carrerón de Masa. Saliendo último desde el 
Pit Lane, logró una extraordinaria cuarta posición final.

Y esta es para mí, la tendencia del campeonato hasta final de temporada:
- Hamilton: en caída. Alonso va a correr en su contra. Y como debutante que es -no hay que olvidar este detalle- le va a venir muy grande luchar contra Fernando y unos Ferrari al alza.
- Alonso: Sufrirará lo que no está escrito para superar a los Ferrari y mantener a raya a su propio equipo y a Hamilton. Un valor seguro para una remontada a lo Schumacher del pasado año. Y ojo a McLaren, que si no prospera el juicio por espionaje, también podrían perder ambos campeonatos apostando por Hamilton en contra de Alonso, como hasta ahora. Y un Alonso cabreado -mñas todavia- se la puede liar muy gorda.
- Masa: Hacia arriba con un coche campeón. Su único problema, un Raikkonen también al alza.
- Raikkonen: Igual que Felipe, pero a la inversa.
Menudo final de campeonato nos espera!
Un abrazo!
PD: Comienza a ser cargante y abusiva la aparición continuada del padre de 
Hamilton chupando cámara. Lamentable los 
saltitos, puños al aire desde el 
pit lane al conseguir su hijo la 
pole; tanto o 
máss como su 
ridícula d
esaparición al finalizar la carrera. Patético.
 
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